Virgen en majestad. La Virgen sirve de trono al niño que se muestra con los dos dedos levantados en actitud de bendecir. En ocasiones aparecen otros personajes, como en este caso, Los tres Reyes Magos. Aunque se representa la Adoración de los Reyes, no existe comunicación entre ellos. Hay rigidez, las figuras están estáticas, los colores son planos, no hay perspectiva ni volumen. Todas las figuras están perfiladas con una linea negra. Para dar sensación de profundidad se pinta el fondo de la imagen con bandas de colores sucesivas. Bajo la escena principal se suelen colocar una hilera de apóstoles con sus símbolos o bien con su nombre en la parte superior.
Pantocrator. Cristo en majestad. Se representa a Jesucristo sentado en el trono en actitud de bendecir con los dedos levantados y mostrando los evangelios; está representado dentro de la Mandorla mística, una especie de forma almendrada que enmarca la figura. A ambos lados las letras griegas: Alfa y Omega, 1ª y última letra del albafeto griego que significan que Jesucristo es principio y fin de todas las cosas. Junto a Jesús se colocan los cuatro evangelistas con sus respectivos símbolos: San Marcos y el León, San Juan y el águila, San Mateo y el toro y San Lucas y el ángel/hombre. Al igual que en la imagen superior, hay rigidez, las figuras están estáticas, los colores son planos, no hay perspectiva ni volumen. Todas las figuras están perfiladas con una linea negra. Para dar sensación de profundidad se pinta el fondo de la imagen con bandas de colores sucesivas. Bajo la escena principal se suelen colocar una hilera de apóstoles con sus símbolos o bien con su nombre en la parte superior.
